Contáctenos
¿Alguna vez te has preguntado cómo se llaman esos vasitos? Ya sabes, esos que contienen la kétchup, el aderezo ranch o una muestra de esa salsa misteriosa de tu restaurante de comida rápida favorito. Tienen varios nombres, y resulta que tienen una historia detrás. Vamos a investigarla. Spoiler: No son solo "esos vasitos de plástico" (aunque todos los hemos llamado así alguna vez).
Para llegar realmente al fondo de esto, necesitamos dividir estas pequeñas maravillas en dos categorías: cerámica y plástico.
Los vasos de cerámica, también conocidos como ramequines, son los más elegantes que se ven en restaurantes de lujo o en programas de cocina. Son reutilizables, aptos para horno y perfectos para servir suflés (de ahí su nombre), postres o porciones individuales de macarrones con queso con un toque de elegancia.
¿Y ahora qué? ¿Y sus contrapartes de plástico? A menudo también se les llama vasos para soufflé, un guiño a sus primos de cerámica. Diseñados para mayor comodidad, son de un solo uso, súper prácticos y, siendo honestos, mucho menos intimidantes. También los oirás llamar mini vasos de plástico con tapa, vasos para porciones o los siempre prácticos vasos desechables para porciones. Básicamente, si es pequeño, de plástico y contiene un condimento, tienes un vaso para soufflé en tus manos.
Adéntrate en la jerga de los restaurantes y escucharás terminología interesante. ¿Esos elegantes ramequines? Están reservados para los vasos de cerámica o plástico reutilizables de alta resistencia, de esos que sirven para servir salsas o aperitivos pequeños con estilo. Son aptos para lavavajillas y están hechos para durar, así que son ideales en cocinas concurridas.
¿Pero los vasos desechables? Ese es el secreto de los desechables. Son los aliados de confianza para llevar, perfectos para condimentos, aderezos e incluso pequeñas muestras de postre. En la mayoría de las cocinas, lo importante es la practicidad: "¡Compra un vaso para el aderezo ranch!" o "¡Se nos acabaron los vasos para soufflé de 237 ml!"... ya te haces una idea.
Los vasos desechables para porciones pueden no ser glamurosos, pero son una auténtica salvación. Dediquemos un momento a apreciar sus numerosas ventajas:
Comprar vasos desechables para porciones puede parecer obvio, pero hay algunos consejos que pueden ayudarte a tomar la mejor decisión:
Entonces, ¿cómo se llaman esos vasitos? Depende. Si es de cerámica y reutilizable, es un ramequín. Si es de plástico y desechable, es un vasito para suflé.mini vaso de plástico con tapa, o simplemente un vaso medidor. No importa cómo los llames, estos pequeños recipientes son los héroes de todos los días, manteniendo tus condimentos bien organizados y tus porciones perfectas.
La próxima vez que disfrutes de unas papas fritas con kétchup o prepares refrigerios para la semana, hazle un guiño a estos campeones anónimos de la comodidad. ¡Se lo merecen!